6 de abril de 2011

...puntos suspensivos...

Tan terco como insufriblemente inseguro.

Despierto pero manteniendo aún vivo un pequeño hilo de sueño.

Moldeando nubes.

Haciendo equilibrios entre todas aquellas inevitables verdades y algunas mentiras que dejamos a medio construir.

Contando cicatrices.

Reviviendo viejas batallas que debieron acabar en tablas, pero que no supimos dar por zanjadas.

Inmóvil.

Inquieto.

Pero, todavía, y pese a todo,

...esperándote

5 de abril de 2011

Círculo

Mientras camino hacia una nueva y titubeante luz, aquella que asoma al final de este pegajoso túnel serpenteante, miro mi reflejo en los charcos que piso y no reconozco del todo al personaje que comencé a interpretar cuando, sin previo aviso, te diluiste, absorbida por el tiempo.

A pesar de los esfuerzos que hago por escapar de mi mismo y de mis torpes pasos, me siguen martilleando en las sienes todos aquellos momentos en que no supimos o no pudimos compartirnos, en que no supimos o no pudimos disfrutarnos.

Y, aunque intento convencerme de que, a pesar de las dudas, avanzo, en realidad  sólo regreso una y otra vez a la casilla de salida, y como en un reiterativo juego infinito, empiezo un nuevo giro, una nueva revuelta, que quizás, sólo quizás, no me lleve a ninguna parte.

4 de abril de 2011

Mirando atrás

Echo de menos
tus sombras sin luz, 
tus dudas,
tus deudas, 
tus bajadas sin subida 
y tus cuestas empinadas, 
tu aliento,
tu piel,
tus cicatrices. 

También echo de menos el hueco 
que se formaba en mi cuarto 
cada vez que te marchabas. 

Pero, sobre todas las cosas
lo que más echo de menos 
es que me eches de menos.

Cuestión de calendario (II)

Me he dejado empapar tanto por la rutina, que los viernes ya no parecen viernes, ni los lunes, lunes. Con la memoria agujereada por todas aquellas aventuras que no supe disfrutar, miro el calendario y sólo veo una monótona sucesión de números en perfecto y cuadriculado orden.

Ósmosis

Revolcándose en un mullido lecho de niebla y azar, disfruta de la imperturbable danza que los minutos interpretan a su alrededor. Aunque intenta evitar ser absorbido de nuevo por la espiral, los giros son cada vez más rápidos y pronto es arrastrado a cruzar la última frontera.

Cuestión de calendario

Los hilos que suturan la ambigua realidad se deshacen y son deglutidos por la imparable digestión del tiempo.Los signos de interrogación empantanan la razón.La mente se espesa.Los actos otrora espontáneos hoy parecen manejados por manos ajenas. Es simplemente un lunes más. ¿O no?